martes, 17 de septiembre de 2024

Dos puntos brillantes en el cielo de la Baixada intrigan a los expertos; para un ufólogo, son signos de un “fenómeno natural desconocido”

Brasil
Dos puntos brillantes en el cielo de la Baixada intrigan a los expertos; para un ufólogo, son signos de un “fenómeno natural desconocido”
En julio también se avistaron objetos en Campo Grande.
Por Marcos Nunes


Ufólogo analiza misteriosa presencia de objetos en el cielo de la Baixada Fluminense — Foto: Divulgación


Noche del pasado 16 de agosto. A las 21:48, dos objetos esféricos luminosos son captados por cámaras de vigilancia instaladas en la terraza de una casa en Nova Iguaçu, en la Baixada Fluminense, cerca de la Serra do Volcão. El equipo es del ingeniero Wagner Vital, investigador de fenómenos anómalos no identificados (UAPs, en inglés, “Unidentified Anomalous Phenomena”). El término creado por el Pentágono es una redefinición del antiguo OVNI, para describir objetos o luces en el cielo que aparecen sin explicación. Vital aclara que los de la Baixada no son ajenos.


Avistamientos de objetos anómalos no identificados en Nova Iguaçu


"No estamos trabajando en ninguna posibilidad de inmediato. Hasta entonces, los objetos que capturamos están clasificados como objetos no identificados, hoy conocidos como FANI. Ya hemos descartado globos, drones y aviones. ¿Por qué? Porque el modo de funcionamiento del objeto es completamente diferente a todo eso", dijo.

Creador del proyecto brasileño de Monitoreo de UAP (Mubras), Vital explicó que los mismos objetos fueron vistos al otro lado de la Serra do Volcão, en Campo Grande. Una imagen similar ya había sido captada la noche del 28 de julio por su equipo. En ese momento se vieron hasta seis puntos luminosos realizando movimientos coordinados en el cielo.

'Me asustó'

Los puntos brillantes también intrigaron al vigilante Carlos Rodrigues, de 45 años, que los filmó con su teléfono celular en Campo Grande. Dice que se asustó por lo que vio cuando salió de un contenedor en horas de la noche para inspeccionar el terreno en la zona donde trabaja.

"Te diré una cosa, fue aterrador. Él (el punto luminoso) estaba quieto en el cielo. Tomé una linterna y él comenzó a evolucionar, a moverse. Creo que estaba a una altura de mil metros. No era un globo porque no seguía la corriente del viento y tampoco era un dron ni un avión”, dijo.

Profesional de la ingeniería acostumbrado al manejo de tecnologías, Wagner Vital es un apasionado de la ufología desde niño. Convirtió el tejado de su casa en una especie de estación para vigilar el cielo. Para ello, utiliza dos cámaras modificadas digitalmente. También creó un programa que puede, entre otras cosas, calcular datos como la posición, la velocidad y la magnitud del objeto. En un informe sobre el avistamiento de la noche del 28 de julio, detalló que los objetos mostraban una intensa luminosidad, variaban en color y se movían en trayectorias lineales y curvas.


Ufólogo analiza misteriosa presencia de objetos en el cielo de la Baixada Fluminense — Foto: Divulgación

Según el investigador, todas las imágenes captadas por sus cámaras se envían a una comunidad OVNI.

"Un estudio realizado en Noruega concluyó que los objetos de este tipo no están relacionados con seres extraterrestres. Creen que son un fenómeno natural de la región, son objetos con características eléctricas, a los que llaman plasmoides. Hoy trabajo con la posibilidad de que sea un fenómeno natural desconocido que aún no entendemos exactamente de dónde vino, por qué vino y que está ahí para intrigarnos. Creo que se puede conectar a algún tipo de electricidad, pero refleja algún tipo de inteligencia”, concluyó.

Contactada, la Fuerza Aérea Brasileña no ayudó a esclarecer el misterio. Sólo informó que el Comando de Operaciones Aeroespaciales recibe, registra y remite los sucesos con reportes de fenómenos aéreos al Archivo Nacional. Y que se conserven fotografías, vídeos y reportajes, sin que exista una investigación. Hay registros disponibles para consulta desde 1952 hasta 2023, agregó la FAB.



Los informes oficiales sobre múltiples avistamientos de OVNIs sugieren un nuevo capítulo en la historia



A lo largo de la historia, los fenómenos inexplicables han ejercido una fascinación hipnótica, generando sentimientos encontrados de atracción y miedo. Cuando estos fenómenos ocurren en el cielo, particularmente de noche, la imaginación se enciende con la posibilidad de que puedan estar relacionados con la vida extraterrestre, lo que da lugar a una rica cronología de debates e investigaciones.

La percepción pública de los objetos voladores no identificados (OVNIs) cambió para siempre después de 1947. El 24 de junio, mientras pilotaba su avión, Kenneth Arnold observó nueve objetos brillantes que se movían rápidamente por el cielo sobre el Monte Rainier en Washington. A partir de entonces, surgieron innumerables informes de OVNIs en todo el mundo, desde el incidente de Roswell (agosto de 1947), en el que una nave espacial extraterrestre supuestamente se estrelló cerca de Roswell, Nuevo México, hasta las Luces de Phoenix (marzo de 1997), que generaron una obsesión global.

El informe de la Fuerza Aérea Brasileña (FAB) sobre avistamientos de OVNIs se publica periódicamente, pero no sigue un cronograma anual fijo. La FAB comenzó a documentar y divulgar oficialmente informes sobre fenómenos aéreos no identificados en 1954. Los registros se mantuvieron confidenciales durante muchos años, pero desde la década de 2010, algunos de estos documentos se han puesto a disposición del público a través del Archivo Nacional, de acuerdo con la Ley de Acceso a la Información.

Aunque la FAB no tiene un cronograma regular para la divulgación de este material, los nuevos documentos suelen publicarse en lotes, que abarcan períodos variables según los testimonios recibidos y analizados. Cada nuevo lote puede sacar a la luz información sobre avistamientos en diferentes años, y los documentos más recientes suelen ser los más esperados por los investigadores y el público interesado.

El informe más reciente reveló que, solo en 2023, los pilotos informaron haber visto 80 objetos voladores no identificados (OVNIs) en el espacio aéreo brasileño. Cada vez que se divulga esta recopilación, se reaviva el debate sobre la existencia de vida extraterrestre y la posibilidad de contacto con seres de otros planetas.

Si bien la noticia suele causar sorpresa y malestar entre la población en general, investigadores de la Asociación Dakila Pesquisas han catalogado evidencias similares durante más de 20 años. Hace tiempo que demostraron que los avistamientos son una manifestación concreta de fenómenos que desafían las explicaciones convencionales e indican la necesidad de que la ciencia tradicional adopte un enfoque más integral para investigar el tema.

Los avistamientos reportados por los pilotos involucran objetos de diversas formas y comportamientos, desde luces que se mueven a altas velocidades hasta estructuras metálicas que desafían las leyes conocidas de la física. En algunos casos, los pilotos describieron objetos que siguieron a sus aeronaves durante largos períodos, realizando maniobras imposibles para cualquier tecnología humana conocida.

Los informes fueron grabados por pilotos comerciales y militares, muchos de los cuales tienen décadas de experiencia en el aire. La FAB, que mantiene un protocolo riguroso para investigar tales sucesos, ha recopilado y analizado los informes en busca de patrones. El informe, aunque técnico, admite que las descripciones proporcionadas por los pilotos no coinciden con ninguna aeronave o fenómeno meteorológico conocido.

Dakila Pesquisas, que cuenta con laboratorios de última generación en Brasil y en el exterior, reconoce que los avistamientos son apenas la punta del iceberg. Según la asociación, el número real de avistamientos es mucho mayor, pero muchos casos no se denuncian por miedo al descrédito o por el estigma asociado al tema.

Los datos del informe de la FAB refuerzan la importancia de la investigación independiente, y lo que está en juego aquí es más que la mera curiosidad. Estamos ante fenómenos que pueden alterar nuestra comprensión del universo y del lugar de la humanidad en él.

Urandir Fernandes de Oliveira, investigador, científico, historiador y presidente del Instituto Dakila Pesquisas, habla sobre el tema: "En Estados Unidos, la cuestión de los OVNIs ganó prominencia después de que el gobierno divulgara informes que confirmaban la existencia de fenómenos aéreos inexplicables, llamando la atención de políticos y militares. En Brasil, sin embargo, el tema todavía se trata con cierta reserva, aunque el creciente número de avistamientos hace inevitable un debate más abierto y transparente".

Urandir y los investigadores de Dakila sostienen que es necesaria una colaboración entre instituciones gubernamentales y centros de investigación independientes para investigar estos fenómenos con la seriedad que merecen. "No estamos hablando de meras teorías conspirativas. Hay datos y evidencias concretas que necesitan ser estudiadas", subraya Urandir.

Con el creciente interés público y la presión por respuestas, Brasil puede estar al borde de una nueva era en la investigación de OVNIs. La Asociación Dakila Pesquisas planea ampliar sus esfuerzos invirtiendo en tecnologías de vanguardia y colaborando con científicos de diversas disciplinas para comprender mejor los fenómenos que desafían la lógica tradicional.

Para muchos, el informe de la FAB es una señal de que todavía queda mucho por descubrir. "Apenas estamos arañando la superficie", concluye Oliveira. "Lo que hay ahí fuera, en el cielo, es una invitación a ampliar los límites de nuestro conocimiento".

Queda por ver si los avistamientos de OVNIs representan el comienzo de una nueva fase en la historia de la humanidad. Lo que es seguro, sin embargo, es que la búsqueda de respuestas está lejos de terminar.




Modificado por orbitaceromendoza

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