martes, 31 de marzo de 2015

Se compartieron extrañas experiencias en el 38vo Café Ufológico de Mendoza

Se compartieron extrañas experiencias en el 38vo Café Ufológico de Mendoza 
por Luis Emilio Annino


De izquierda a derecha: (sentados) David Alaniz, Martín Fuentes, Rosa del Carmen García, Esteban Pieroni, Silvia Vega, Guillermo Andrada y Ernesto Hernández; (parados) Gastón Pravata, Ariel Godoy y Raúl Díaz.

La tarde del miércoles 25 de marzo pasado se presentó oscura y con ligeras precipitaciones, pero este desapacible clima no impidió la participación de los distintos asistentes al 38vo Café Ufológico de Mendoza, que tuvo lugar en el Café Five Stars, nuestro punto de encuentro ubicado al final de la conocida Galería Independencia, en calle Lavalle al 45. Se trató de una nueva oportunidad en donde aquellos interesados en compartir sus experiencias, conocimientos e investigaciones vinculadas al estudio e indagación sobre el fenómeno OVNI y la posibilidad de la existencia de vida extraterrestre se acercan para compartir sus reflexiones y pensamientos relativos a esta fascinante temática.

En esta ocasión participaron Gastón Pravata, Raúl Díaz, Martín Fuentes, Ariel Godoy, Daniel Hendryk, David Alaniz, Esteban Pieroni, Ernesto Hernández, Rosa del Carmen García, Silvia Vega, Guillermo Andrada y quien esto suscribe.

Inicialmente tuve la oportunidad de compartir con los presentes la resolución de un acuerdo verbal entre el coordinador del Café Ufológico de Mendoza y Omar, el dueño del lugar en donde nos reunimos (Café Five Stars), para disponer en próximas reuniones de un espacio preparado para el empleo de equipos multimedia, lo que nos permitiría llevar a cabo presentaciones que hagan uso de fotografías y video en pantalla grande y en un sector separado, brindando mayor comodidad y posibilidades de expresión a los participantes de nuestro café.

Seguidamente, David Alaniz comentaba que en las pasadas vacaciones de verano, a fines de enero, y luego de cenar en su casa, decidió salir al patio de la misma a fumar un cigarrillo. Frecuente observador del cielo, David notó que en el espacio existente entre la constelación de la Cruz del Sur y la Falsa Cruz del Sur había una aparente estrella que durante el tiempo en que la miró fue paulatinamente perdiendo su brillo hasta desaparecer. Consultado sobre las presencia de masas nubosas en el lugar, señaló que el cielo estaba despejado, y manifestó sus dudas por lo que vió al señalar que no sabía que explicación astronómica podría asignarle a lo presenciado.


Cruz del Sur, Cruz del Diamante y Falsa Cruz del Sur (Crédito: bitacoradegalileo)

Luego tuvo la palabra Ernesto Hernández, quien se acercaba por primera vez al café ufológico para comentar algunas de sus vivencias e ideas relativas al fenómeno OVNI. Ya en su adolescencia tuvo su primera aproximación hacia lo sobrenatural, cuando habiendo sufrido un accidente en una pierna, fue beneficiado en su recuperación gracias a la intervención de una persona de nombre José Bataller, quien habría realizado una imposición de manos en la zona afectada. Con el tiempo esta persona se convertiría en una suerte de guía para Ernesto, a quien le atribuía ciertos dones especiales como el de la precognición o la telepatía. De hecho, durante la década de 1980, Ernesto participó en grupos contactistas que hacían prácticas de transmisión del pensamiento, con el fin de mejorar los esfuerzos de comunicación con aquellos que él denomina "hermanos superiores", mensajeros cósmicos de buena voluntad. Algunas de estas experiencias se realizaban en una zona del piedemonte mendocino conocida como Las Lajas, en el departamento de Las Heras, que era una antigua zona de prácticas de tiro de la Fuerza Aérea Argentina, algo que ya fue tema de conversación en pasados cafés ufológicos debido al hecho de que algunos de los experimentadores eran suboficiales de dicha entidad militar. Para ese entonces su nuevo referente era Julio Díaz, quien fuera seguidor de la contactada Perla Perviú. Además señaló que en una noche a fines de los 80, mientras regresaba del sitio mencionado en un coche junto a otras tres personas, fueron testigos del avistamiento, en sus palabras, de un "platillo volador" que los sobrevolaba, para luego alejarse en dirección Norte, hacia la vecina provincia de San Juan; seguidamente retornaba y repetía la maniobra, mientras algunos de los presentes se subía al capot del automóvil para apreciar mejor el fenómeno. Con el tiempo Ernesto dejó de frecuentar estos grupos, desconociendo si seguían activos, a lo que Rosa del Carmen García le respondió que seguía en contacto con Julio Díaz y su grupo, que conocía los días de sus reuniones y que podía facilitarle la manera de comunicarse con el mismo.


Silvia Vega, Ernesto Hernández, Daniel Hendryk y Luis Emilio Annino.

Ya finalizando la velada, Raúl Díaz nos informaba que recientemente había tomado conocimiento de parte de un vecino suyo, que se desempeña en una entidad que ofrece servicios de emergencias médicas, que unos días antes de reunirnos en este café ufológico, mientras estaba de guardia en una ambulancia, alrededor de las 21.30 hs pudo escuchar por el radiollamado que otro móvil estaba siendo enviado para auxiliar a una persona que estaba herida en un punto de la zona comprendida entre Canota y Vaquería, poco antes de llegar a Agua de los Pajaritos (depto de Las Heras, camino hacia Villavicencio). Por tratarse de un lugar de escaso tránsito vehicular, este amigo de Raúl permaneció atento a cualquier llamado urgente para colaborar con este colega. Cerca de las 23.30 hs le piden a través del radiollamado que se comunique por celular con el médico responsable de la ambulancia. Llama a esta persona y la información que recibe lo sorprende: la ambulancia con el herido a bordo estaba detenida, no podía arrancar, y una luz roja se encontraba encima del vehículo, causando gran preocupación por cuanto los equipos médicos electrónicos que llevaban quedaron todos aparentemente desconfigurados. Pasado ese difícil momento, pudieron retornar a su base de operaciones, preocupados por la extraña experiencia acontecida y por las dificultades para compartir abiertamente lo sucedido.

Ya cerca de las 21.30 hs., se puso fin a este ameno encuentro, dejando abierta la invitación a todos los participantes para acercarse al


"39no Café Ufológico de Mendoza: Día: Miércoles 29 de abril de 2015. Lugar: Café Five Stars - Lavalle 45 (Galería Independencia) - Ciudad de Mendoza. Horario: 19 hs. Participación libre". 

Esperamos contar con su presencia.

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