Entrevista a Ralph Blumenthal, autor de "The Believer"
por Vesto PR
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Ralph Blumenthal en su casa de Nueva York. (Foto: Deborah Blumenthal). |
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En The Believer: Alien Encounters, Hard Science, and the Passion of John Mack, el periodista del New York Times, ganador del premio Pulitzer, Ralph Blumenthal, cuenta la historia de cómo el renombrado psiquiatra de la Escuela de Medicina de Harvard John E. Mack quedó fascinado con una variedad de fenómenos paranormales que van desde desde las abducciones extraterrestres hasta los OVNIs y las vidas pasadas. Blumenthal entrevistó a docenas de amigos y colegas de Mack, y llevó a cabo años de investigación en archivos para comprender qué llevó a Mack a los márgenes de la ciencia y qué aprendió allí. Blumenthal responde algunas preguntas sobre The Believer, que será publicado en marzo por High Road Books, un nuevo sello editorial de University of New Mexico Press:
¿Cómo se enteró por primera vez de John Mack y qué le hizo querer escribir un libro sobre él?
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John Mack era muy conocido en su época, pero parece que se ha olvidado en gran medida desde su muerte. ¿Porqué es eso?
Fue un colaborador colorido de su propia leyenda. Los medios gravitaron hacia él. Eso se disipó en gran medida una vez que se fue. Y aunque arrojó luz sobre el misterio que lo consumió, sigue sin resolverse.
¿Por qué Mack arriesgó su reputación académica al decidir estudiar a personas que afirmaban haber experimentado abducciones extraterrestres?
Habiendo tropezado con los mayores misterios científicos de todos los tiempos, tenía demasiados principios para simplemente dar la espalda. Sentía verdadera curiosidad y disfrutaba con la publicidad y la controversia. Y su madrastra le había enseñado a no huir nunca de una pelea.
¿Cómo cambiaron las opiniones de Mack sobre la naturaleza de estos secuestros con el tiempo?
Después de descartar todas las otras posibles explicaciones (enfermedad mental, engaños, delirios, búsqueda de publicidad, etc.), Mack pronto concluyó que sus supuestos experimentadores estaban diciendo la verdad y que las abducciones eran una categoría distinta de eventos anómalos que en realidad habían ocurrido en alguna definición de realidad. Más tarde llegó a verlas como una de las más diversas experiencias místicas que no podían ser probadas y que no necesariamente debían tomarse literalmente en nuestra realidad física.
¿Qué papel jugó Budd Hopkins en la vida y la investigación de Mack, y cómo difirió su interpretación de las abducciones extraterrestres?
Hopkins fue un consumado pintor y escultor cuya detección de un OVNI lo convirtió en el primer investigador notable de abducciones. La visita de Mack a Hopkins en 1990 expuso a Mack a los extraños relatos de los secuestrados y rápidamente formó su propio grupo de estudio. Pero Hopkins siempre creyó en la realidad física de los encuentros. Mack llegó a cuestionarlos, eh, alienando a Hopkins. Pero los dos se reconciliaron antes de la muerte de Mack.
¿Por qué la administración de Harvard reaccionó con tanta dureza a la publicación del primer libro de Mack sobre abducciones extraterrestres? ¿Cuáles eran sus preocupaciones sobre su trabajo clínico y la investigación psiquiátrica?
Harvard fue el hogar de muchas investigaciones poco convencionales, pero el alto perfil de Mack con un tema tan ridiculizado por la ciencia y la academia convencionales avergonzó a los superiores de las facultades de medicina. Se sintieron presionados a investigar sus métodos de investigación y aparente falta de desapego científico. Desafortunadamente, convocaron lo que parecía una inquisición secreta. Mack y sus abogados libraron una feroz lucha por la exoneración y Harvard finalmente absolvió a Mack de cualquier delito.
En 2017, ayudó a divulgar la historia del New York Times sobre un programa secreto del Pentágono dedicado a analizar OVNIs. ¿Cómo influyeron en este libro esa historia y su posterior informe sobre el esfuerzo del Pentágono?
Fue más al revés. Sabía por mi investigación sobre John Mack desde 2004 sobre la larga y accidentada historia del gobierno que rastreaba y encubría el fenómeno OVNI. Eso me ayudó a comprender el significado del nuevo y serio interés del Pentágono en lo que se conoció como UAP, Fenómenos Aéreos No Identificados. Pero nuestras historias del Times nunca trataron sobre extraterrestres o secuestros. Tuvimos que ceñirnos a información más verdadera, como la detección por parte de la Marina de los misteriosos objetos voladores.
¿Cómo se relacionó el interés de Mack en los fenómenos paranormales con su activismo político: su participación en la campaña antinuclear, su defensa de la paz israelo-palestina y otras causas izquierdistas?
Había un patrón en la odisea de Mack, como digo en el libro: una progresión de pasiones desde la reforma de la salud comunitaria hasta Lawrence de Arabia, la paz en Oriente Medio, el desarme nuclear, la conciencia cósmica, la vida extraterrestre y, en última instancia, la vida después de la muerte. La respiración holotrópica abrió a Mack a estados alternos de conciencia. Como él mismo dijo, Esalen "hizo un agujero en mi psique y los OVNIs volaron".
¿Te has vuelto más escéptico o menos?
Eso es difícil de decir. Creo (ahí vamos de nuevo con la creencia) que Mack estaba en algo. Estamos lejos de responder a todos los acertijos del cosmos. No he abandonado mi escepticismo periodístico, pero me voy con Philip K. Dick: "La realidad es aquello que, cuando dejas de creer en ella, no desaparece".
¿Cuál es el legado de John Mack? ¿Cómo debería ser recordado?
Como el héroe imperfecto de un viaje mítico. Como digo en el libro, partió, viajó lejos, tuvo muchas aventuras y regresó para contar la historia alrededor de la luz del fuego digital, por el bien de la humanidad.
Modificado por orbitaceromendoza
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