A sus 74 años, Gerda Horneck lleva ya casi cincuenta
dedicada a esclarecer uno de los mayores misterios de la Ciencia: el
origen de la vida. ¿Surgió la vida en nuestro planeta como una excepción
irrepetible o es una característica general del Universo?
¿Hay vida en otros planetas? ¿Cómo debemos buscarla? Los experimentos
de esta microbióloga se han puesto a prueba en el espacio en numerosas
ocasiones, desde la última misión Apolo a la Luna a la estación rusa Mir
o, en la actualidad, en la Estación Espacial Internacional (ISS). Entre
otras cosas, Horneck ha demostrado que muchos microorganismos son
capaces de resistir a las duras condiciones del espacio exterior en el
interior de meteoritos, y sembrar así la vida en otros planetas. Horneck
ha participado en el ciclo “La ciencia en el Cosmos”,
organizado por la Fundación BBVA, con una conferencia sobre lo que hasta
ahora sabemos sobre el origen de la vida. Durante su breve estancia en
Madrid, la investigadora concedió una entrevista a ABC.
- ¿Hay vida fuera de la Tierra?
- Pienso que hay cada vez más indicativos de que debe de
haber vida ahí fuera. Ahora bien, si esa vida es o no como la nuestra,
es otra cuestión.
- Indicativos pero no pruebas…
- No, no todavía…
- Y cuál es su opinión personal al respecto?
- Mi opinión personal es que hay mucha vida en el Universo,
que hay muchos lugares donde esa vida es más que probable, aunque es
necesario llevar a cabo más estudios. Creo que los elementos básicos
existen desde siempre, pero que la vida evoluciona sólo donde las
condiciones son más favorables.
- Cree usted que la vida en la Tierra se originó aquí o que llegó del espacio?
- Si me pregunta por mi opinión personal, le diré que creo
que la vida en la Tierra se originó aquí, a partir de ingredientes que
llegaron de fuera, quizá a bordo de cometas, porque esos ingredientes
están por todas partes. No necesitamos la panspermia para explicar la
vida en la Tierra.
- Cómo puede estar tan segura de eso?
- Como Christian De Duve, creo que la vida emerge en
cualquier parte siempre que se den determinadas condiciones. La
astrobiología estudia precisamente eso, la evolución de la vida en el
contexto de la evolución del universo.
Y es que toda la historia del Universo lleva hacia la vida. Desde el
Big Bang a la formación de los primeros átomos, estrellas, planetas...
Los elementos de la vida son comunes: Carbono, hidrógeno, oxígeno,
nitrógeno, fósforo y azufre. Y estos elementos se forman en el corazón
de las estrellas. Algunos incluso después de sus muertes violentas. La
vida se compone de las cenizas de generaciones pasadas de estrellas.
- Es decir, lo que hay por todas partes son los ingredientes necesarios…
- Eso es. Pero en el medio interestelar también hay una
química muy activa y allí se forman moléculas orgánicas. Cianido de
hidrógeno, ácido fórmico, formaldeido y otros compuestos orgánicos
complejos. Hemos encontrado hasta 50 moléculas orgánicas diferentes en
el medio interestelar, en las nubes de polvo y gas de las que nacen las
estrellas. Esas nubes se colapsan y forman las estrellas. Y en el mismo
proceso, de los restos de la formación estelar, también nacen los
planetas. Es decir; las moléculas orgánicas pasan de este modo del medio
interestelar a los planetas. Y finalmente, en algunos de esos planetas,
dan origen a la vida.
- Y piensa que esa vida es la misma en cualquier parte del Universo? Es decir, que sigue los mismos principios en todas partes?
- No lo sabemos. Pienso que hay muchas probabilidades de
que también en otros lugares la vida esté basada en el carbono, porque
la mayoría de las moléculas complejas que encontramos en el medio
interestelar se basan en el carbono. Que luego el sistema de información
de esas moléculas sea ADN o alguna otra cosa es algo que no sabemos. Es
precisamente eso lo que estamos buscando…
- Carbono… Y no cree posible que haya formas de vida que se basen en otros elementos?
- Es muy improbable. Algunos creen que podría haber vida
basada en el silicio, pero el silicio no tiene la flexibilidad que tiene
el carbono.
- Recuerdo el caso de las supuestas bacterias basadas en el arsénico…
- Si, si… pero al final resulta que también se basaban en el carbono, ja ja ja…
- Y no será que buscamos vida basada en el carbono porque sólo conocemos ese tipo de vida?
- En cierto modo, si… Conocemos los principios básicos que
hicieron posible la vida aquí en la Tierra y eso es también lo primero
que buscamos fuera… Y resulta que ahí fuera, entre las estrellas, está
lleno de moléculas de carbono… Sin embargo, hay que tener cuidado,
porque los procesos que llevan a la vida podrían no ser los mismos en
todas partes.
-
Se han encontrado moléculas orgánicas en el espacio, en enormes nubes
de polvo y gas, en galaxias lejanas… prácticamente por todas partes.
Significa esto que la vida es una característica general del Universo?
- Las piezas básicas están ahí, por todas partes, pero esas
moléculas no son vida. Para que la vida se forme y pueda evolucionar se
necesitan más cosas. Un planeta sólido, que ese planeta esté en la zona
de habitabilidad de su estrella para que haya agua líquida, que esa
agua interaccione con la litosfera y que en ella además se disuelvan
minerales y compuestos químicos que puedan “encender” el metabolismo.
-
Cree usted que la vida se originó en un punto concreto del Universo y
de allí se expandió a todas partes o que, por el contrario, puede surgir
en muchos lugares de forma independiente?
- Creo que la vida puede originarse en muchos lugares
diferentes, si en ellos existen las condiciones físicas y químicas
adecuadas. Sin embargo, la vida también puede nacer en un mundo concreto
y ser transportada a otro distinto en el interior de rocas, que caen en
él en forma de meteoritos.
- Y cuánto tiempo pueden resistir estos microorganismos viajando por el espacio?
- Durante mucho tiempo, incluso un millón de años. Yo he
dirigido experimentos espaciales para demostrar que, si están protegidos
por una capa de polvo, muchos organismos logran sobrevivir a las
radiaciones letales y a las bajísimas temperaturas del espacio exterior.
La radiación cósmica no es un problema para los microorganismos.
- Usted estudió la resistencia de microorganismos expuestos fuera de la Estación Espacial Internacional…
- Si, y no solo en la ISS, sino en otras estaciones y
durante muchos años… Es una larga historia y fue de esa forma, pieza a
pieza, dato a dato, como fue posible componer la imagen completa y
llegar a la conclusión de que, efectivamente, el proceso del que
hablábamos antes es perfectamente posible.
- Entonces esos microorganismos son indestructibles?
- Ja ja ja, casi… El problema es el tiempo, ya que después
de un largo periodo de exposición al ambiente espacial terminan
degradándose. Y el otro problema es la radiación ultravioleta, capaz de
alterar su ADN y que puede destruirlos en segundos...
- Y cómo logran estos organismos evitar la radiación ultravioleta y sobrevivir durante tanto tiempo?
- Pues permaneciendo en el interior de la rocas.
- Existe una teoría según la cual la vida que conocemos pudo originarse en Marte y viajar después hasta la Tierra…
- Si, es una interesante teoría y las cosas podrían realmente haber sido así.
- Cree que puede haber vida en Marte?
- Creo que existen indicaciones suficientes como para
buscarla. Pero si la hay, desde luego no será en la superficie. Los
últimos hallazgos del Mars Science Laboratory demuestran la existencia
de lagos de agua en Marte en los tiempos en que surgió la vida en la
Tierra. Las condiciones eran muy similares en ambos planetas. Hoy, sin
embargo, la superficie de Marte es estéril. Hay que buscar en el
subsuelo. Aquí, en la Tierra, se han encontrado organismos vivos en el
interior de rocas a cinco km. de profundidad…
- Y en otros lugares del Sistema Solar?
- Claro, por ejemplo en Europa, una luna de Júpiter que
sabemos que cuenta con un enorme océano de agua bajo la capa de hielo
que la cubre por completo. Otros mundos prometedores son Titán o
Encelado, dos lunas de Saturno.
-
Y a parte de microorganismos, ¿podría haber ahí fuera criaturas más
complejas? Animales, vegetales o incluso seres inteligentes…
- Si, es perfectamente posible. En la Tierra, durante miles
de millones de años, la única vida presente eran microorganismos. La
vida compleja solo llegó al final, en tiempos muy recientes. Más de tres
mil millones de años de bacterias y, al final, unos 500 millones de
años de vida compleja. Si la vida ha tenido el tiempo suficiente, ese
proceso podría haberse dado también en otros lugares, y podría haber
ahora en otro planeta dos personas sentadas y hablando sobre el origen
de la vida, quién sabe…
- En qué trabaja usted actualmente?
- Mi interés principal en estos momentos está en Marte,
porque su historia se parece mucho a la nuestra. Y actualmente busco
áreas en la Tierra que sean extremas, que se parezcan a Marte,
para saber qué características tiene la vida que se da en esas zonas, y
saber así mejor qué es lo que debemos buscar en Marte. Aquí, en España,
es muy interesante la zona de Riotinto, que se parece mucho al Planeta
Rojo.
- ¿Tenemos ya la tecnología suficiente como para encontrar vida fuera de la Tierra?
- Sí, tenemos tecnología suficiente, pero hay que tener
cuidado con hacer anuncios precipitados, como a veces hacen algunas
agencias espaciales para tener notoriedad… Tenemos muchas evidencias,
pero aún ninguna prueba sólida de vida fuera de la Tierra.