Extraño triángulo volador y sorprendente encuentro aéreo abordados en el 68vo Café Ufológico de Mendoza

Extraño triángulo volador y sorprendente encuentro aéreo abordados en el 68vo Café Ufológico de Mendoza

por Luis Emilio Annino

Los participantes de la última reunión, un encuentro de históricos y nuevos asistentes, animados por la idea de compartir amenas charlas sobre los "no identificados".

El pasado miércoles 27 de septiembre tuvo lugar un nuevo encuentro del Café Ufológico de Mendoza, que se desarrolló en nuestro tradicional sitio que es el Café Five Stars, ubicado en la calle Lavalle 45, al final de la conocida Galería Independencia. Una vez más fue una gratificante ocasión en la que los presentes pudimos compartir diversas experiencias, relatos y conocimientos relativos al fenómeno OVNI y la posibilidad de la existencia de vida extraterrestre.

Entre los asistentes a esta reunión estuvieron: Raúl Díaz, Ariel Godoy, Daniel Hendryk, Martín Fuentes, Alejandro Asalgado, Laura Lencinas, Laura González, Mariana Muñoz, Cristina Rodríguez, Violeta Moreno, Fernando Rodríguez, Susana Occelli, Héctor Sawiak, Diego Escolar, Alejandro Rosario, Miguel Marinelli y quien esto suscribe. 

Para empezar, dimos la bienvenida a Cristina Rodríguez, quien vino acompañada de Violeta Moreno  (ambas residentes en la zona montañosa de Potrerillos) y de su hermano Fernando Rodríguez. Con varias experiencias sorprendentes por compartir, Cristina recordó una que vivió en la primavera de 1976, cuando de pequeña residía en una finca de unas 6 hectáreas, situada en la zona rural correspondiente a Colonia Segovia (departamento de Guaymallén). Allí, cerca de las 21 hs., mientras estaba acompañando a una tía que estaba alimentando a una perra que tenían en una casa secundaria, ubicada a unos 50 metros de la vivienda principal, se encontró con un fenómeno increíble: se trataba de un objeto volador de forma troncocónica, del tamaño de un automóvil y con tres luces (roja, blanca y azul) que, viniendo desde atrás de la propiedad, se desplazaba a la altura de los álamos que delimitan la propiedad, conjuntamente con un zanjón que bordea ese perímetro. Aparentemente este silencioso sobrevuelo se efectuaba sobre el mencionado canal, de manera casi vertical, ligeramente inclinado el eje en su avance y con un rasgo peculiar: poseía una suerte de reflector que efectuaba un barrido a lo largo de su recorrido, como si buscara algo. La tía, atemorizada, se alejó del lugar, mientras que Cristina continuaba mirando al extraño triángulo volador, que repentinamente se apagó y desapareció de su vista cuando el aparato comenzaba a ingresar en un terreno vecino, cerca del cual existía una torre de alta tensión. No fue su única experiencia, por lo que seguramente Cristina ampliará más sobre estas inusuales vivencias en nuestros futuros encuentros. 

Seguidamente contamos con la palabra de Héctor Sawiak, otro recién llegado que se sumaba a la mesa del café ufológico. Residente durante varios años en la vecina provincia de San Juan, y ya de regreso en nuestra provincia, este piloto civil y ufólogo que ha participado en organizaciones nacionales investigadoras del fenómeno OVNI, nos compartía dos interesantes observaciones de las que fue protagonista. 

La primera tuvo lugar en la noche del 14 de marzo de 2015. Había salido para la zona de Pie de Palo (San Juan) a eso de las 21 horas para observar el cielo. La elección de la zona no sólo tenía que ver con la escasa contaminación lumínica, sino también por la cantidad de avistamientos (es una zona bastante "transitada"). Luego de dos horas, retornaba a su casa sin haber visto nada. Se durmió y ya en la madrugada del domingo 15, a las 3:20 de la mañana se despertaba por alguna razón y lo primero que hizo fue abrir la persiana. La ventana de su habitación, ubicada en un cuarto piso, tenía vista a una de las principales calles de la ciudad de San Juan (calle Rioja). En una fracción de segundo, un objeto esférico, irradiando una luminosidad amarillenta, proveniente del sureste, atravesaba su perspectiva visual a una velocidad increíble. La capa de nubes era baja (probablemente 600 a 700 metros de altura). El objeto se desplazaba apenas por debajo de dicha capa. Según cálculos posteriores, tomando como referencia algunos puntos de su visual, arrojaron una velocidad probable de Mach 3 (aproximadamente 3000 km/h). No hubo estampido sónico ni ruido alguno. La luz del objeto impactó su retina (le dejó como una estela luminosa que percibía mientras pestañeaba; esto, por otra parte, le sirvió como elemento suficiente para tener certeza de lo visto).

La segunda le ocurrió volviendo de un vuelo de navegación desde San Juan. Eso fue el 20 de noviembre de 2016. Partió desde el aeroclub Mendoza (situado en la zona de La Puntilla) hacia el aeroclub San Juan a las 10:15 hs. Ya volviendo desde San Juan hacia la Puntilla a las 12 hs, a eso de las 12:30, sobrevolando el desierto de Lavalle, y con una tormenta inminente, un objeto proveniente desde el sur pasó en dirección contraria a la suya a no más de 3 metros del ala izquierda del avión (un Archer matrícula LV-ARJ). El objeto en cuestión era ovoide, de no más de 2 o 2,5 mts. de diámetro. Recordaba que el fondo negro de la tormenta le permitió divisarlo fugazmente (dada su velocidad). Su color era blancuzco, de un brillo lechoso y atenuado. Consideró imposible que se tratara de un dron, dado el nivel de vuelo que traía y la zona que sobrevolaba, mucho menos por la velocidad que traía.

A continuación, conocimos la experiencia de Laura Lencinas, quien alrededor de las 20 hs. del pasado 4 de septiembre, luego de salir de su trabajo, comenzó a contemplar la Luna, ya que le llamaba la atención su apariencia. Comenzó a sacarle fotos y luego, al ver lo que la cámara había captado (no así con sus propios ojos), se sintió sorprendida al detectar la presencia de un punto luminoso, al que no sabía atribuirle una explicación precisa. Destacó su manifestación silenciosa, comparado con el posterior pasaje de una ruidosa aeronave. Laura mostró interés en que esas imágenes fueran analizadas para encontrarles una posible explicación. La secuencia fotográfica puede verse a continuación:

Al poco tiempo me puse en contacto con el amigo ufólogo Ariel Maderna, analista de imágenes y colaborador de organizaciones de investigación OVNI, para que me diera su interpretación de lo que podría haber captado la cámara de Laura. Su respuesta fue que eran los reflejos de la luz de sodio amarilla, ya que allí en donde ésta no estaba tampoco salía el reflejo. Es algo bastante frecuente e incluso podría producirlo la luz lunar si hubiera sido la única fuente de luminosidad, pero la más cercana y brillante luz de sodio es la responsable del enigmático punto luminoso captado en la cámara de Laura.

Desde el Café Ufológico de Mendoza agradecemos a Ariel Maderna por su amable atención y gentileza en responder a nuestra consulta.

Finalizando el encuentro se propuso realizar una nueva salida de campo, conocida como Operación Suricata, que tendría lugar en la noche del viernes 6 al sábado 7 de octubre, en San Alberto (Uspallata) y en las inmediaciones de la Estancia Yalguaraz (límite con San Juan), a lo largo de la ruta 149 y que será comentada próximamente.

Alrededor de las 22 hs. dimos por finalizada esta animada reunión, invitando a todos a acercarse y participar del próximo café ufológico que será el

"69no Café Ufológico de Mendoza: Día miércoles 25 de octubre de 2017. Lugar: Café Five Stars - Lavalle 45 (Galería Independencia) - Ciudad de Mendoza. Horario: 19 hs. Participación libre".

Esperamos contar con su presencia.